Javier Urra desmonta en la UIMP algunos tópicos sobre la Familia: “El hogar es donde más violencia hay, seguro”

Santander. – 'Hogar dulce hogar' o 'la infancia es la etapa feliz' son algunas de las frases más manidas y más falsas del inventario social. El profesor de Psicología Jurídica, Javier Urra ha derribado estos tópicos en XIV Escuela de Psicología «José Germain», Psicología y estructuras familiares, donde ha asegurado que la "violencia entre la pareja, de padres a hijos y de hijos a padres es más frecuente en casa que en la escuela y en las calles".

Otra idea bastante extendida es que "la infancia es la etapa feliz" de la vida, pero el que fuera exdefensor del Menor se ha encargado de desmentir esta afirmación con numerosos argumentos. A su juicio, muchos menores están expuestos a la violencia de género o crecen condicionados por familias desestructuradas. En concreto, Urra se ha referido a los menores que cometen actos delictivos y a los efectos de ciertas conductas sociales que influyen en estos comportamientos, entre ellas una devaluación moral o la falta de implicación en la educación de los progenitores que "eluden la vida familiar".
Respecto al maltrato infantil, ha explicado que "el machaque moral es mucho más difícil de ver que el físico", y es más abundante que el maltrato a la mujer, porque "hay padres que no quieren a sus hijos por mil razones". Además, ha indicado que no hay imágenes de niños maltratados y en esta sociedad "lo que no se ve no existe".
Urra, que ha hablado "desde la experiencia", ha señalado también que abunda la falta de "autocrítica y la hipocresía" entre los padres con hijos conflictivos. Y esto deriva en el eterno debate sobre la conveniencia o no de reformar la Ley de Responsabilidad Penal de los Menores, que establece que los de menos de 14 años no son imputables, con la consecuente "cierta sensación" de impunidad. "Si un menor está ocho años de su vida encerrado, sale destrozado, con un odio incalculable", ha argumentado. Por eso considera fundamental la "protección jurídica del menor".
Como conclusión de su visión general sobre la sociedad y la familia, el psicólogo ha considerado que se están cortando "las ramas del árbol" y que hay que "erradicar estos problemas que se repiten generación tras generación" desde la base. Algunas de las posibles soluciones que ha indicado son recuperar "valores esenciales" como la "compasión", inculcar "la importancia del perdón" o "maternizar la sociedad", en definitiva, "sensibilizarla".


Visión histórica
Tras la inauguración del curso, a cargo del vicerrector de Innovación y Desarrollo de Proyectos, Rodrigo Martínez-Val, el director del curso y catedrático de Psicología Básica, Helio Carpintero, ha ofrecido una visión histórica del "complejo" tema de la familia hasta la actualidad, ya que es "un poliedro con tantas caras que algunas absorben nuestra atención y otras pasan desapercibidas".
Según ha señalado Carpintero, el curso aborda diferentes perspectivas de este "rompecabezas" que es la familia, "base" de la vida de un individuo, y estructura social determinada por una serie de creencias que "marcan nuestro destino". Además, ha señalado la importancia de esta como "garantía de la continuidad de la sociedad". Por ello ha indicado que el "envejecimiento demográfico" es uno de los "grandes problemas" que hay hoy día.
Los alumnos del curso, que celebra su XIV edición, han realizado con Javier Urra un taller con base teórica sobre violencia filioparental, una "realidad sumamente compleja en la que los hijos agreden a sus padres".

 

Fotografía: Pablo Hojas