Markus Frischhut plantea los retos del Derecho Europeo en términos de ética y religión en la UIMP

Santander.Markus Frischhut, profesor y coordinador de Estudios de Derecho de la Unión Europea, ha participado en el VIII Encuentro interautonómico sobre protección jurídica del paciente como consumidor con una ponencia sobre el rol que ocupan la ética y la bioética en la legislación europea.

Entre el amplio abanico de cuestiones, Frischhut ha elegido el complejo mundo del Derecho Europeo en relación al concepto de ética aplicado a temas tan controvertidos como el aborto, la eutanasia, la investigación con células madre, la fecundación in vitro o los alimentos transgénicos.
El punto de partida ha sido la "falta de consenso" entre los Estados miembros sobre lo que "es o no es ético". "Las carencias -ha señalado el profesor- deben ser compensadas mediante los principios de dignidad establecidos en la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea, y no con valores religiosos".
Sin embargo, ha mencionado que el Tribunal Europeo de Justicia no puede interceder en la legislación de los países miembros en el abordaje de algunos temas, como la Sanidad. E incluso "algunos estados solicitan que se pueda regular libremente en el campo de la moral pública", ha matizado.
En cualquier caso, pese a que los Tribunales de Estrasburgo y Luxemburgo ofrecen una amplia libertad legislativa, Frischhut ha señalado que ambos establecen que las resoluciones se basen "estrictamente en la legalidad y no en consideraciones éticas ni religiosas porque no son un argumento". A su juicio, el objetivo es llegar a "un compromiso mínimo entre los Estados miembros como es el caso del Convenio de Patentes Europeas, y educar a los ciudadanos en la formación y educación ética".
En el contexto actual es un reto para los tribunales tener la información científica apropiada y de ello se deriva el Comité de Bioética Europeo que evalúa los efectos éticos de la biotecnología. Lo complejo ha explicado el ponente es "conseguir que sus quince miembros tengan en cuenta todas las visiones posibles de más de 500 millones de europeos en asuntos tan complejos".

Fotografía: Juan Manuel Serrano