Rubiralta y Figar abogan por un pacto de Estado en educación

Santander. – El Ciclo de Conversaciones España, Julio 2015 va llegando a su fin. Tras dos intensos días en los que se ha hablado de sociedad civil y participación, contexto internacional, Estado e instituciones y cultura, esta mañana le ha llegado el turno a la educación, un tema capital para el futuro de nuestro país, como ha quedado patente durante esta tercera jornada del Ciclo.

Marius Rubiralta, catedrático de Química Orgánica y director del Campus de la Alimentación de la Universidad de Barcelona, y Lucía Figar, exconsejera de Educación, Juventud y Deporte de la Comunidad de Madrid, han sido los protagonistas de la jornada y los encargados de poner voz a un tema que tiene aún un largo camino que recorrer para lograr estar a la altura de lo que se espera de ella.

Así, para Rubiralta la educación es uno de los elementos fundamentales para salir de la crisis, aunque en los últimos años no hemos sabido seguir sufragando las necesidades financieras que demandaba. "Ante una crisis, la ciencia y la educación son la base del futuro, pero a la hora de hacer ajustes presupuestarios se tratan al mismo nivel que el resto de partidas"; lo que sin duda provoca, como afirmaba Figar, que en España haya más del 50 de paro juvenil y cerca de un 21% de fracaso escolar, unas cifras claramente relacionadas entre sí para la experta: "El fracaso escolar a quién más golpea es a las familias más humildes, cuya posibilidad de prosperar está únicamente supeditada a la educación".

Relativo a los presupuestos y recortes, ambos han tratado un tema fundamental como es el del sistema de becas, sobre lo que Lucía Figar ha afirmado que "España no puede disminuir su sistema de becas porque restaría oportunidades para todos aquellos que, con mucho esfuerzo, han llegado hasta ahí", colocándonos en una situación de dificultad "porque en este aspecto ya estamos muy por debajo del resto de países europeos".

Además, la exconsejera remarcó la necesidad de exigir rendimiento académico "a todos por igual y no sólo a los estudiantes becados" para lograr unos niveles aceptables con respecto al resto de Europa. Por su parte, el catedrático expresó su preocupación por la situación que se vive en los comedores escolares, ya que "hay niños que comían una vez al día en el comedor escolar y ahora, con los recortes, prácticamente no están bien alimentados", para lo que un pacto de Estado, de ámbito político y económico, sería fundamental en estos momentos.

La conversación también ha tratado el tema de la excelencia universitaria y cómo la llegada de la crisis ha mermado el prestigio que habían adquirido nuestros centros con relación al resto de Europa, todo ello ante "un descenso de las inversiones que genera una situación de freno a su crecimiento y modernización" al tener una financiación "de subsistencia y no de excelencia", afirmaba Rubiralta, asegurando que "no podemos llenarnos la boca con que el cambio debe hacerse desde el conocimiento sin potenciar el entorno universitario. Las universidades están bajas de moral y necesitan un cambio generacional y una modernización importante", que según el experto estaban preparadas para acometer cuando irrumpió la crisis.

Además, Rubiralta puso sobre la mesa un tema de vital importancia para el futuro de la enseñanza universitaria española al apuntar a "nuestro mal hacer en el tema de la relación con América Latina", siendo ésta nuestra mejor vía para abordar la internacionalización de la educación superior.

Sobre las competencias en materia de educación, para Lucía Figar éste es un debate colateral, pues el tema central es "la necesidad de apoyar más a los centros educativos y darles mayor autonomía y flexibilidad" para que sean capaces de sacar lo mejor de cada alumno y alcancen esa excelencia tan necesaria, una excelencia en la que también tiene un gran papel el claustro de profesores y la cúpula directiva de los centros, "pero esa mayor autonomía tiene que ir acompañada de unos recursos económicos", puntualizaba la exconsejera.

Sobre la formación profesional, ambos han coincidido en que "necesita un cambio importante y mayor inversión en España, pues aún no tiene el papel y el equilibrio que sí alcanza en otros países europeos", sirviendo de ejemplo la situación de Alemania donde la formación profesional es competencia de las Cámaras de Comercio.

Para Lucía Figar, tendría que ser responsabilidad no sólo del ámbito académico, sino también del económico: "El sistema productivo debería plantearse que es una responsabilidad compartida", afirmaba.

Otros titulares destacados que se han desprendido de la conversación han sido los de Rubiralta al afirmar que no sobran graduados (a la hora de paliar el desempleo juvenil), siendo éste "un error muy común entre los que no entienden que la formación es la base del progreso" o que "nuestra universidad difícilmente podrá competir fuera de España si no tiene unos niveles de ingresos similares a los de su entorno"; o los de Lucía Figar, concluyendo que "la búsqueda de la excelencia, de la calidad y de la internacionalización deben darse aportando mayores competencias a los centros educativos" o que "la educación es un elemento estratégico que parece que precisa de un pacto de Estado".

Fotografía: Fundación Botín