Sergio Ramírez: “Me gusta decir que tuve más lectores que electores”

Santander. – "Me gusta decir que tuve más lectores que electores", bromea Sergio Ramírez cuando le preguntan por sus cuatro años como vicepresidente de Nicaragua. El escritor, que dirige el curso magistral Confesiones de un fabricante de mentiras de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, reconoce que no le fue nada bien en política. Por eso, ni se plantea volver a ocupar una responsabilidad similar: "Opino sobre el futuro de América Latina como ciudadano, no como político", ha afirmado.

El autor participa en los Martes Literarios donde hablará, entre otras cosas, de su última novela: Sara, una obra "transgresora" que ha comparado con La Regenta de Leopoldo Alas Clarín. "Trata de una mujer que busca la libertad y la independencia tratando de integrarse en un mundo en el que le está prohibido reír", ha asegurado. Además, ha explicado que narrar el mundo interior de una mujer es "una gran seducción como escritor", y ha añadido: "La vida femenina sigue siendo un misterio".
Asimismo, otra de las grandes incógnitas para Sergio Ramírez es la situación de América Latina, sobre la que ha reflexionado. "No es lo mismo hablar de Brasil que de Nicaragua. Hay sistemas políticos muy asentados y otros con tendencias al autoritarismo", ha señalado. Respecto al estado anímico de su país, Nicaragua, que el próximo año celebra elecciones, el escritor adelanta que "no habrá sorpresas": "Es un organismo electoral totalmente subjetivo, no hay quien cuente los votos y está sometido al Gobierno", ha resaltado. "No presenta para mí ningún reto democrático", ha añadido.
Sergio Ramírez está inmerso en su próxima novela, una secuela de su obra El cielo llora por mí, con la que pretende "hacer un retrato de la Nicaragua de hoy en día". Seguro que consigue transmitirlo, porque como ha detallado, "la literatura es más que un espejo de la realidad" y es que, para él, "no hay nada mejor que la literatura".

Fotografía: Juan Manuel Serrano y Pablo Hojas