Susana Marcos acerca a la UIMP “las distintas tecnologías basadas en la luz para el diagnóstico de la visión”

Santander.– Está al frente de un laboratorio pionero que a finales de los años 90 describió "los cambios de la cirugía refractiva para corregir la miopía", una técnica que, en sus comienzos, "inducía otras imperfecciones porque no se transfería bien la energía del láser a la córnea, no se respetaba su forma natural". Susana Marcos, directora del Laboratorio de Óptica Visual y Biofotónica del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, ha participado en la International School on Light Sciences and Technologies, donde ha asegurado que la idea en la que descansa su trabajo es "acercar las distintas tecnologías basadas en la luz para el diagnóstico de la visión".

Así, en su ponencia Understanding, diagnosis and corrections of the eye using light ha explicado cómo en su laboratorio investigan "el instrumento óptico más fascinante que uno pueda imagi nar", el ojo. "Con toda la tecnología comprendemos la física, la anatomía del ojo y sus aspectos perceptuales, todo esto nos da paso a proponer y desarrollar nuevas soluciones a problemas muy extendidos en oftamología", ha explicado la profesora de investigación del Instituto de Óptica del CSIC.
De hecho, Marcos ha dado detalles sobre dos proyectos con gran impacto social que se llevan a cabo en su laboratorio. El primero es la creación de "unos simuladores visuales basados en herramientas que se aplican en astronomía y que se aplican para corregir las imperfecciones del ojo". Así, estos simuladores permitirán al paciente "ver el mundo real cómo lo vería después de someterse a una cirugía", y además son programables con "los diferentes diseños que existen en lentes comerciales". De esta forma se consigue uno de los objetivos en el uso de la tecnología de la luz aplicada a la óptica: "Individualizar las correcciones", ha comentado.
El segundo, el proyecto M+Visión desarrollado en colaboración con el MIT y la Fundación Madri+d es "un sistema para medir la refracción ocular en cuestión de segundos y con mucha precisión", ha explicado la directora del Laboratorio de Óptica Visual y Biofotónica. Este método es "importante porque en muchas zonas del mundo hay gente con limitaciones visuales que no tiene gafas. Y el problema no es no tener acceso a unas lentes sino a una prescripción, ya que -debido al escaso número de optometristas que se dan en países en vías de desarrollo- se forma un cuello de botella que la OMS ha identificado como uno de los retos para buscar una solución", ha detallado Marcos.
Estos proyectos son las últimas novedades de un campo en el que a través de "ciencia de excelencia se genera conocimiento que a su vez puede protegerse con patentes y llegar a manos de especialistas para mejorar la vida del paciente", ha afirmado. Y es que esta vez la luz no sirve solo para ver las cosas más claras, sino para "generar impactos académicos y reales sobre la economía y la vida de las personas", ha asegurado.

 

Fotografía: Juan Manuel Serrano